
Ordeno mi cabello para que no lusca tan desaliñado. Pinto mis ojos para disimular un poco el paso del tiempo. Y estas manos las guardo en los bolsillos. Disimulo mis pasos al caminar, y esta forma de pensar tan peculiar, intengo no mover los brazos al hablar, los dedos petrificar. Tengo razones para buscarte, para esperar que descubras los caminos que hay para encontrarte, y entre lo Mundano y lo Sagrado intento respirar, y los primeros dias de primavera me hacen retroceder, me es mas dificil respirarte, no te encuentro en estos aromas, donde está el perfume que me hace amarte. Esta locura y esta pasion se estremecen sin control, es irremediable, y esconder los deseos de dolor, y esconder las lagrimas que dejo tu traicion, y las llagas, y la flagelacion. ¿Donde debí guardarme los recuerdos de tu adios? Donde nunca lo volvieras a mensionar.